lunes, 11 de abril de 2011

LAS NOTAS

Cuando iba al instituto hicimos una campaña en contra de la exclusión por las notas, es decir reivindicábamos que no se clasificara a los alumnos y alumnas por su calificación exclusivamente sino que se miraran  otras cosas, aptitudes y actitudes que se llamarían ahora. El caso es que yo siempre he sido buena estudiante y un profesor me pilló poniendo en el pasillo un cartel que ponía "No soy un 6, ni un 8, soy una persona" (aún me acuerdo) y me obligó a quitarlo, me amenazó con suspenderme (casi me fastidia la nota media de COU), y lo hubiera hecho de no ser por la oposición de otros profesores. Me acusó de no ver la realidad y de soñar.Pero cómo no iba a hacerlo, si en la juventud no se sueña con cambiar el futuro, qué nos queda.

El caso es que ahora soy yo la madre y soy yo la que va a recoger las notas de mi hijo. Mi hijo es un estudiante muy bueno, reponsable e inteligente, pero demasiado exigente consigo mismo. Me duele en el alma que sufra con siete años por las notas y que incluso le duela la barriga a causa de los nervios.Este fin de semana yo no entendía nada, mi marido y yo jamás le hemos exigido que saque determinadas notas, nuestro mensaje siempre ha sido que hiciera sus deberes, estudiara si hacía falta, se esforzara lo suficiente y que jugara y fuera niño, que fuera feliz. Que los resultados que obtuviera siempre serían bienvenidos porque se había esforzado. No se puede ser perfecto.
El caso es que viendo el nivel de agobio que tenía el pobre y deduciendo que de casa no le venía el estres, y hablándolo con una amiga psicóloga esta mañana, pensamos que era en el cole donde quizá se sentía presionado por mantener el status de buen estudiante, buen niño ...
Esta tarde mientras la tutora, que es encantadora y muy profesional, me enseñaba unas notas impecables (todo sobresalientes) yo le explicaba que yo quería que mi niño fuera feliz, que estaba orgullosa de sus logros, claro, pero que lo que deseaba es que le observaran en el cole y que le explicaran que no siempre  se puede ser perfecto, que está permitido equivocarse. Asi que la profesora enseguida me ha escuchado y ha comprendido, es más le ha dicho que ella también se equivoca y que no pasa nada por hacerlo.

De mayor quiere ser cíentífico, y el viernes me dijo "Mamá si me equivoco en una simple suma no podré serlo" - Cariño, le dije yo, los científicos descubren cosas porque se equivocan en sus experimentos y lo vuelven a intentar una y otra vez.

Sigo pensando lo mismo que cuando tenía unos cuantos años menos, no somos números, somos personas y nuestra máxima debe ser intentar ser felices. Y desde luego, ese es el trabajo principal de un  niño de siete años.

Ojalá estuviera frente a mí ese profesor, seguro que ahora no se burlaría de mi manera de pensar. 



14 comentarios:

Diario de una cuarenta. dijo...

K lindo... pues si k es exigente y maduro para la edad k tiene, le podía pasar un poko al mio, k anda kon pajaros en cabeza... es muy bueno, pero lleba una temporada k no da pie kon bola, tenemos k estar todo el santo día detrás de él... no, a él el futuro no le preocupa mucho, -Chris k te gustaría ser de mayor ??? -ya lo pensaré mamá, k keda mucho, me dice él...
Disfrutar esta disfrutando de lo lindo, ha mejorado este trimestre mucho, a si k...

mama de parrulin dijo...

Ay pobre, con lo pequeño que es!
Yo recuerdo sacar todo sobresalientes y al llevarlos a casa oir, Es tu obligación, y a mis amigas hacerles un regalo porque habían aprobado todo!
No me presionaban, de hecho casi siempre hacía los deberes en el autobús, era sin esfuerzo.
Es dificil obligar a un niño que estudie si no quiere, pero más difícil aún que aprenda a disfrutar con los juegos. A ver cómo lo haces.
Ya nos contarás.

Ana dijo...

Virginia, si es muy maduro, demasiado, siempre ha sido un miniadulto. Tu peque es feliz y se está superando a si mismo, eso es lo más impotante, que mejore. Es normal que no le preocupe el futuro con lo que queda para eso je je

Mamá de parrulín, gracias a mi me pasaba igual yo sacaba sobresalientes y nunca recibí un regalo por ello, mis padres siempre decían que lo que obtuviera era para mí, yo ahora tampoco lo hago, no premio por las notas, si me apetece comprarle algo lo hago con otra excusa. En cuanto a disfrutar de los juegos, si que lo hace, es muy juguetón y muy deportista y se lo pasa genial, lo que pasa es que siempre, siempre cuando ha terminado sus tareas, no puede disfrutar si tiene algo pendiente del cole, salvo en el fin de semana que sabe que tiene más margen :)

Bailarete dijo...

Pobrecillo, yo aqui mi hija mayor es lo contrario al tuyo, muy inteligente y todo sobresalientes sin pegar golpe...me pone de los nervios, la mandas a estudiar y no tarda un cuarto de hora en decir que ya está todo....pero cada uno es un mundo y lo que hay es que apoyarles y no agobiarles, haber si la profe le ayuda a nos ser tan perfecto.

Ana dijo...

Cartafol, ojalá, a mi me gustaría que mi peque se agobiara menos, a ver si entre todos lo conseguimos. Qué complicado es educar eh?

Maria dijo...

Yo también he sido muy exigente conmigo mismo desde muy pequeña, siempre buscando el 10 y sufrindo a veces por no conseguirlo, fui una estudiante modelo (hasta que llegue a la universidad). Mi colegio era uno de esos en los que sí se tenia en cuenta otras cosas aparte de los examenes, un colegio algo "hippie" para su epoca en el que estudie muy bien. Creo que depende mucho del caracter que el niño tenga, aún así creo que vuestra actitud con él es la adecuada. No presionar ni darle demasiada importancia a las notas, elogiando su esfuerzo a pesar del resultado. Muchos besos

mamá de un bebote dijo...

Qué rico tu niño...tu pequeño científico...
y tú que madre más atenta a todo: efectivamente no puede estar agobiado,tensionado y con dolor de tripa, inmerso en una competitividad tan en serio desde tan chiquitín, es una maravilla que saque buenas notas, pero más maravilloso es ser feliz

Annie74 dijo...

Pobre, ya esa presion con lo pequeñito que es. Estoy contigo, tiene que ser feliz, ya habra tiempo de presiones por una u otra cosa. Es un pequeño que quiere ser científico, ni policia, ni futbolista... Seguro que algo grande consigue¡

http://lascosasdemipitufo.blogspot.com/

De chupetes y babas dijo...

Ay pobre niño, no puede ser!! Qué maravillosa respuesta le diste, explicándole que los científicos crecer precisamente equivocándose...

Ana dijo...

María, gracias, espero que sepamos hacerlo bien

Mamá de un bebote, totalmente de acuerdo :)

Annie, yo se que tengo una pequeña promesa de algo importante, espero saber ayudarle a conseguir sus sueños

Albertina, gracias, a veces las mamás estamos inspiradas

Olives and Pickles dijo...

Que vision del futuro!!
Lindo!

Anónimo dijo...

Coincido totalmente contigo.

Es una gran suerte tener a un profesor/a a la altura. En una reunión se sorprendió que no nos extrañara, e incluso que nos gustara, que en gimnasia no sacase un sobresaliente.

Me parece muy necesario el fomentar el valor de la disciplina y el esfuerzo pero sin llegar a convertirlos en "máquinas amargadas"

Un saludo.

Flipper.

Ana dijo...

Olives and Pickles, gracias :)

Totalmente de acuerdo Flipper, no queremos m´´aquinas sino personas

willy dijo...

Que iniciativa que tenías a pesar de ser una ninia!!! Respect!

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